No quiero seguir
viviendo así,
muriendo aquí.
Me dirás
que las cosas
no son así,
que todo es mejor
de lo que uno piensa.
Que un cristal
todo lo puede cambiar.
Que vale más
usar un cristal rojo
que uno negro
para mirar la vida.
Pero la realidad
es la que es,
es solo una
y nada más.
Es una y mala,
es triste y
es grosera.
Esto lo escribí mientras preparaba una despedida, una triste despedida, una que nunca olvidaré.
De parte de otro blogger te doy la bienvenida al maravilloso mundo de los blogs, espero que te sea gratificante y aprendas tantas cosas que ahora mismo no puedes imaginar.
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